"Reunión informativa: Diálogo de Saberes para la Construcción de la Universidad de los Pueblos de Sur"
En el marco de la Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo, con convocatoria de la Secretaría de Extensión Universitaria y Bienestar Estudiantil, se realizó la reunión informativa sobre el "Diálogo de Saberes para la Construcción de la Universidad de los Pueblos del Sur" realizado en Caracas, Venezuela, los días 25, 26 y 27 de octubre, evento organizado por el Ministerio del Poder Popular para la Educación Superior del gobierno venezolano.
La reunión comenzó con la intervención del Dr. Hugo Calello que puso a los presentes al tanto de la situación actual de Venezuela y de su proyecto de país, así como de las polémicas en torno a la figura del presidente Hugo Chávez Frías, poniendo énfasis en su compromiso histórico hacia las transformaciones sociales, económicas y, por supuesto, políticas de aquel país.
A continuación, Rodrigo Redondo, invitado a dicho "Diálogo de Saberes" en representación del MUP y ComUni, nos relató su experiencia como participante, puntualizando sobre los aspectos principales de lo conversado en las mesas de debate y las conclusiones extraídas el último día, haciendo hincapié en las distintas posturas tomadas en los cinco ejes de construcción, los consensos logrados y la metodología de trabajo
Luego, se dió paso al arquitecto Rodrigo Martín, que expuso los ejes conceptuales sobre los que se viene construyendo el proyecto ComUni y los posibles lineamientos para la elaboración de una contrapropuesta o alternativa de diálogo hacia la "Universidad de los Pueblos del Sur" enfocada desde el contexto argentino.
Por último, se invitó a Beatriz Pedro y Enrique Zothner, secretarios de extensión de las facultades de arquitectura e ingeniería respectivamente, a opinar sobre lo expuesto y aportar sus experiencias en el trabajo con las comunidades.
Se cerró la reunión con el compromiso común de seguir construyendo un espacio de interacción con y para la comunidad desde la colaboración orgánica entre los diversos proyectos existentes, fijando para el mes de febrero la próxima reunión de trabajo.
En el marco de la Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo, con convocatoria de la Secretaría de Extensión Universitaria y Bienestar Estudiantil, se realizó la reunión informativa sobre el "Diálogo de Saberes para la Construcción de la Universidad de los Pueblos del Sur" realizado en Caracas, Venezuela, los días 25, 26 y 27 de octubre, evento organizado por el Ministerio del Poder Popular para la Educación Superior del gobierno venezolano.
La reunión comenzó con la intervención del Dr. Hugo Calello que puso a los presentes al tanto de la situación actual de Venezuela y de su proyecto de país, así como de las polémicas en torno a la figura del presidente Hugo Chávez Frías, poniendo énfasis en su compromiso histórico hacia las transformaciones sociales, económicas y, por supuesto, políticas de aquel país.
A continuación, Rodrigo Redondo, invitado a dicho "Diálogo de Saberes" en representación del MUP y ComUni, nos relató su experiencia como participante, puntualizando sobre los aspectos principales de lo conversado en las mesas de debate y las conclusiones extraídas el último día, haciendo hincapié en las distintas posturas tomadas en los cinco ejes de construcción, los consensos logrados y la metodología de trabajo
Luego, se dió paso al arquitecto Rodrigo Martín, que expuso los ejes conceptuales sobre los que se viene construyendo el proyecto ComUni y los posibles lineamientos para la elaboración de una contrapropuesta o alternativa de diálogo hacia la "Universidad de los Pueblos del Sur" enfocada desde el contexto argentino.
Por último, se invitó a Beatriz Pedro y Enrique Zothner, secretarios de extensión de las facultades de arquitectura e ingeniería respectivamente, a opinar sobre lo expuesto y aportar sus experiencias en el trabajo con las comunidades.
Se cerró la reunión con el compromiso común de seguir construyendo un espacio de interacción con y para la comunidad desde la colaboración orgánica entre los diversos proyectos existentes, fijando para el mes de febrero la próxima reunión de trabajo.
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LA UNIVERSIDAD DE LOS PUEBLOS DEL SUR
Por Carlos Rivera Lugo.
Los pasados días 25, 26 y 27 de octubre se efectuó en Caracas el histórico evento “Diálogo de saberes para la construcción de la Universidad de los Pueblos del Sur”, convocada por el Ministerio del Poder Popular para la Educación Superior de Venezuela. Fui invitado a participar en dicho encuentro, el cual constituye la más reciente de las iniciativas estratégicas de integración y unidad regional tomadas por el gobierno presidido por Hugo Chávez Frías.
Su propuesta está enmarcada dentro de lo que se conoce como la Misión Alma Mater, un programa para la construcción de una veintena de universidades. La meta es llevar la educación universitaria a las comunidades, a aquellos sujetos que hasta ahora se han visto excluidos de ésta. Un ejemplo es la Universidad Bolivariana de Venezuela, que si bien tiene una sede central en Caracas, constituye una institución municipalizada. Por ejemplo, en el caso que más conozco, su Programa de Formación en Estudios Jurídicos está organizado en por lo menos 250 municipios de 19 estados, con aproximadamente 60,000 estudiantes y 5000 profesores. Al llevar la educación universitaria a los municipios, no extraen a los estudiantes de sus comunidades, facilitándoles su continua vinculación a éstas para una más efectiva contribución a la satisfacción de sus necesidades particulares. Los procesos de educación se integran, pues, a las realidades de los espacios territoriales más inmediatos: el municipio y la comunidad.
La Universidad de los Pueblos del Sur (UPS) está inscrita dentro de los objetivos de la Misión Alma Mater, aunque sus fines y posiblemente su estructura trasciendan el marco geográfico del país. Si hubo algo en que se insistió en el encuentro sobre la UPS, fue que ésta se debe desterritorializar. No se debe encerrar en un recinto o ciudad universitaria. No debe tener una sede singular, sino que tantas sedes como la diversidad nacional, popular y comunitaria que encauce.
Estamos hablando de un proyecto de ruptura con la concepción moderna y liberal prevaleciente de la Universidad, la cual responde a las lógicas de organización del mercado capitalista como si estuviesen determinadas por un orden natural e ineludible. La actual concepción arranca de la idea aristocrática de la educación, inaugurada por Platón en la antigüedad griega, la cual tomó la forma de una “academia” dedicada a la formación de los hijos de las elites económicas y sociales en función del poder. Ésta concepción contrastaba con la de Sócrates que se negaba a concentrar territorialmente la educación en un lugar dado y prefería el ágora como espacio más democráticamente constituido, es decir, de mayor libertad e inclusión.
La “aula” no es las cuatro paredes de un salón de clases ni la “universidad” se reduce a los cuatro costados de un recinto. La “aula” tiene que ser también y sobre todo “comunidad”. La “universidad” tiene que recoger la amplia diversidad de miradas e historias representadas en cada sociedad, en cada pueblo. Tiene que ser también y sobre todo una “pluriversidad”, replanteándose así el sentido de lo universal desde la justa valoración de la pluralidad. Ello a su vez debe servir para potenciar un nuevo sentido de lo unitario, las identidades y la comunidad de intereses.
En ese sentido, se propuso la realización de un inventario de las experiencias educativas y universitarias en toda la América nuestra, que puedan servir de puntos de arranque o apoyo de la UPS, para que sea así efectivamente una institución representativa de los pueblos del Sur y sus realidades endógenas. En principio, se dijo, la UPS podría ser una asociación que articule esta diversidad de experiencias alternativas universitarias y comunitarias.
En cuanto a sus fundamentos filosóficos y políticos, la UPS se definió como una institución comprometida con la construcción de saberes emancipadores y subjetividades emancipadas para la construcción del socialismo del Siglo XXI. Aquí también se insurge contra los saberes que se imparten bajo el modelo prevaleciente de “universidad”, en cuyo seno fundamentalmente sólo goza de legitimidad el pensamiento único hegemónico del orden civilizatorio capitalista. En franco contraste, el saber emancipador es el saber destrabado y liberado de la gente, hasta ahora sometido. Y es que más allá del saber erudito y privilegiado de la academia, existe un saber hasta ahora descalificado de la gente, del pueblo, un saber acumulado tras una historia de luchas colectivas e individuales, generales y locales.
La educación constituye una traducción dinámica de formas de hegemonía, según el Profesor Luis Damián, vicerrector de la Universidad Bolivariana. La UPS tiene que plantearse el desarrollo una nueva forma de hegemonía: solidaria, democrática y humanista. Toda educación posee una naturaleza política, a la vez de que toda relación política o de hegemonía en la sociedad es necesariamente una relación educativa. Como tal trata en el fondo de la construcción de subjetividades, sean éstas subordinadas a la reproducción continua del sistema actual o, en la alternativa, emancipadas para la reconstrucción de la sociedad y el poder sobre la base de unos fines éticos nuevos.
Por tal motivo, la educación se tiene que relacionar íntimamente con el mundo de la vida. Los saberes emancipadores tienen que construirse a partir de una relación dinámica entre teoría y práctica, idea y experiencia. Además, tiene que recoger la necesaria complejidad totalizante de esa misma vida; de ahí que tienen que ser en el fondo transdisciplinarios, es decir, tienen que superar la arbitraria compartimentación o clasificación disciplinaria del saber, que nos induce a comprensiones parciales y simplistas de la realidad.
Finalmente, el saber emancipador es el resultado de una educación contextualizada desde las propias realidades y necesidades de los pueblos del Sur. Al respecto hay que superar el reduccionismo economicista al que el mercado capitalista ha sometido la universidad y la subjetividad privatizada y alienada que esta produce. Contrario sensu, la UPS no puede girar en torno a los requerimientos y las lógicas del capital. Debe ser guiada por las necesidades y aspiraciones multidimensionales de los pueblos y de las comunidades.
La Universidad de los Pueblos del Sur parte, pues, de una consideración estratégica de la educación universitaria, a partir de una conciencia práctica de que el saber es poder. Y el saber como el poder, al fin y a la postre no se impone desde las cimas institucionales pretendidamente eruditas de la sociedad capitalista actual, sino que se construye y reproduce desde abajo, desde la comunidad y desde la gran variedad de puntos nodales dentro de los cuales se disputa cotidianamente la hegemonía.
Luego de haber participado en este intenso y profundo intercambio de ideas y experiencias sobre la Universidad que efectivamente necesita hoy los pueblos del Sur, regresé a Puerto Rico cargado de fervor y esperanza, reafirmado en mi convencimiento de que el mundo atraviesa en la actualidad el umbral de una nueva era de ruptura paradigmática en todos los órdenes. Se está efectivamente revolucionando el modo en que hasta ahora hemos visto el mundo y las formas en que nos organizamos para su transformación. Y no me cabe duda de que la organización de la Universidad de los Pueblos del Sur habrá de constituir otro testimonio elocuente del proceso revolucionario que hoy se vive a través de Nuestra América, de eso que Marx y Engels caracterizaron como “el movimiento real que anula y supera al estado de cosas actual”.
Ya lo advirtió Chávez: “Nunca es más perfecta la dominación que cuando logra hacer que los dominados piensen en los mismos términos que los dominadores”. De ello parece ser ilustrativo el triste papel que pretende ejercer hoy un grupo de estudiantes y profesores de la Universidad Central de Venezuela (UCV), en contra del proceso revolucionario que se da en ese hermano país con el apoyo de la inmensa mayoría del pueblo. En el fondo, no creen en la democracia ni en la inclusión, sino que sólo en mantener los privilegios de clase de los pocos, mantenidos a costa de la miseria y la exclusión de los muchos. Contra ese estado de cosas actual es que hoy se forja la insurrección de los saberes emancipadores de los pueblos del Sur.
12 de noviembre de 2007
www.claridadpuertorico.com
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